martes, 18 de enero de 2011

BELLA Y ELEGANTE...CERÁMICA



¿Son magnificas, verdad?, me gustaría poder transmitiros, la emoción que produce poder ver estas cerámicas en el museo del azulejo de Lisboa. El museo es un edificio que invita a quedarse, a relajarse, viendo poco a poco la historia de este material, en apariencia pobre, poco valorado, pero que por su transformación, lo hace extremadamente fuerte.

La mayoría de las piezas que pongo, son muy antiguas, árabes en su mayoría, siglo X, XI, utilizadas en Sevilla, Granada…y esta antigüedad es lo que más me impresiona, admirarlas o tocarlas y siguen con una frescura y elegancia atemporal, difícil de apreciar en otros materiales.

Conseguir de un material en apariencia tan simple como la arcilla y transformarlo en algo tan fuerte, tan elegante, es lo que creo que es indispensable apreciar, y no siempre se hace. Se convierte en revestimientos, en figuras decorativas, en vajillas, …

No sé el porqué, de mi fascinación por este material. Cuando estudiaba, no le di la suficiente importancia, hasta que tuve que hacer yo esa transformación, entonces empecé a apreciarlo. Con los años, y más experiencia te das cuenta que, todas las características que tiene la cerámica, se asemejan un poco con la vida.

No todo es lo que parece, la simplicidad, la humildad, la elegancia, no siempre se encuentran donde uno cree. La importancia de ser fuerte y a la vez flexible, las transformaciones, a veces, a fuego.

Arcilla y fuego, no se necesita nada más ¡!





Edición y fotografías: Elia Carro.